Iniciar cualquier negocio implica una gran cantidad de riesgo. La tasa de fracaso de las empresas emergentes en la España ronda actualmente el 60% en los primeros cinco años, pero algunas empresas son intrínsecamente más riesgosas que otras. En el caso de las asociaciones, las tasas de fracaso alcanzan un máximo de alrededor del 75%. Se enfrentan a todos los riesgos de otras empresas emergentes, como problemas de flujo de caja, condiciones cambiantes del mercado y competencia, pero también tienen el riesgo añadido que surge cuando dos o más personas trabajan juntas.
Pero no todo es pesimismo. Las asociaciones también tienen ventajas sobre otras empresas, ya que los fundadores pueden compartir los costos iniciales y beneficiarse de sus habilidades complementarias. Sin embargo, si bien muchas asociaciones prosperan, otras pueden tener dificultades para superar los valores, objetivos y perspectivas únicas que aporta cada socio.
Teniendo esto en cuenta, estos son algunos de los pasos que puede seguir para mitigar los riesgos y construir un negocio exitoso y duradero.
- Elija el socio adecuado
Puede que parezca obvio, pero puedes reducir enormemente el riesgo eligiendo, en primer lugar, al socio adecuado. Al realizar su debida diligencia en esta etapa, puede ayudar a mitigar el riesgo financiero y de reputación en el futuro. Incluso si está considerando hacer negocios con un amigo o familiar, aún debe tener como prioridad realizar verificaciones de antecedentes y evaluaciones de crédito antes de iniciar cualquier posible asociación comercial. Este paso puede ayudarle a comprender mejor a las partes involucradas, incluido su apetito por el riesgo y cómo han manejado sus asuntos en el pasado. Esta información le permite tomar decisiones informadas basadas en hechos sólidos en lugar de conjeturas e ilusiones.
También debe considerar como son de compatibles, en que va a representar al funcionamiento diario del negocio. Iniciar un negocio con una pareja puede parecer una buena idea, pero piense en el impacto en el negocio si el lado personal de la relación se estropea. Del mismo modo, es posible que desee un socio que sea más agresivo en su toma de decisiones para equilibrar su estilo de aversión al riesgo. Sin embargo, tener enfoques tan diferentes puede provocar conflictos a largo plazo.
Al elegir un socio comercial, busque alguien que comparta la misma visión, que sea confiable y financieramente sólido. Idealmente, también deberían tener buena experiencia empresarial, inteligencia emocional para llegar a acuerdos y compromiso con el éxito a largo plazo del negocio.
- Elija una estructura empresarial adecuada
Una sociedad civil es la forma más básica de sociedad comercial en la España. Las sociedades civiles son fáciles de configurar y no es necesario registrar la empresa en el Registro Mercantil ni realizar presentaciones periódicas. Una de las características definitorias de una sociedad civil es que cada socio paga impuestos individualmente sobre su participación en las ganancias en lugar de que el impuesto recaiga sobre el negocio en sí.
Aunque la facilidad de una sociedad civil la hace popular, puede que no sea la mejor estructura comercial para usted. Establecer una sociedad de responsabilidad limitada (SRL) o una sociedad limitada (SL) puede resultar beneficioso a la hora de mitigar los riesgos. Estas estructuras comerciales limitan su responsabilidad financiera, por lo que si el negocio fracasa, puede perder su participación original en el negocio, pero no es responsable de sus deudas.
- Crear un acuerdo de asociación integral
Aunque es posible constituir legalmente una sociedad sin tenerla, se debe considerar esencial contar con un acuerdo de asociación bien redactado. Si no establece un acuerdo de asociación, se regirá por la Ley de comercio, que lo expondrá a varios riesgos, que incluyen:
- Todos los socios son igualmente responsables de las deudas y obligaciones de la empresa
- Cada socio tiene derecho a la misma parte de las ganancias de la empresa, independientemente de cuánto hayan aportado
- No existe un proceso de salida claro, incluidos los períodos de notificación y la valoración de los activos o transferir propiedad
- No existen pautas para tomar decisiones comerciales importantes
- No existen mecanismos para resolver estancamientos y disputas
Un acuerdo de asociación formal elimina estos riesgos al brindarle a usted y a sus socios comerciales un marco sólido para aplicar a su relación. También puede evitar costosas disputas legales y brindar certeza en situaciones que de otro modo tendría dificultades para resolver.
- Establecer roles claros
Determinar el papel de cada socio antes de iniciar el negocio puede evitar que se pisen los pies unos a otros. Debes asignar roles de acuerdo con la experiencia específica y las habilidades que ambos tengan. Y si bien deben tomar decisiones claves de forma conjunta, cada socio también debe tener autonomía para tomar decisiones dentro de sus funciones para reducir la complejidad y ayudar a escalar el negocio.
- Encuentre un mediador de confianza
No necesariamente necesita un mediador profesional, pero debe tener a alguien a quien acudir cuando necesite una opinión objetiva e imparcial. Esta persona debe ser familiar para ambos socios pero no estar vinculada a ninguno de ellos. También deben tener mucha experiencia empresarial y la capacidad de mantener la calma. Si usted y su pareja tienen opiniones diferentes, este tercero puede ofrecer una visión imparcial para evitar conflictos y ayudarle a encontrar una solución.
Espere desafíos, pero prepárese para superarlos.
Una asociación comercial exitosa puede ser una de las relaciones más gratificantes que jamás haya tenido. La clave del éxito es tomar medidas para mitigar los riesgos, escuchar las opiniones de los demás y tener métodos previamente acordados para superar los desafíos y las decisiones. Hágalo bien y en 10 años podrían estar bebiendo “ron” juntos en el Caribe para celebrar la exitosa venta de su negocio.
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MABR. Puedes encontrar este y otros artículos en https://www.ondirect.es/blog
